La larga tradición de la industria y de la investigación química en Cataluña permite que en ella funcione un conjunto de centros de investigación de primer nivel internacional. En estos momentos, a partir del estudio de la ciencia molecular y del uso de estrategias transversales, la ciencia química catalana puede hacer frente a la resolución de problemas socialmente y económicamente relevantes. A la vez, desde este ámbito ya se está contribuyendo, de manera decidida, a la implantación de una economía basada en el conocimiento, que, al final, permita un progreso social y económico mucho más armónico y respetuoso con el medio ambiente y con los intereses de la ciudadanía y del país.
Ciclo: Deafíos del S.XXI. La voz de la Ciencia
Organizado por: Residencia de Investigadores