Nuevas herramientas terapéuticas para tratar la fibrosis pulmonar

La fibrosis pulmonar idiopática es la patología pulmonar intersticial más frecuente y letal en nuestro país, con una supervivencia media de 2-4 años desde el diagnóstico. Desde la entrada en el siglo xxi hemos asistido a un avance no sólo en cuanto al diagnóstico de la enfermedad sino también en el ámbito del conocimiento fisiopatológico que se desencadena en el proceso fibrótico y, consiguientemente, en los fundamentos de «la era antifibrótica pulmonar». Por lo tanto, hemos pasado de una patología infradiagnosticada y tratada bajo una base «antiinflamatoria» (actualmente sabemos que, lejos de ser efectiva, provoca mayor mortalidad asociada), a trabajar de manera multidisciplinar en equipo para identificar a estos pacientes en fases iniciales de la enfermedad y así aplicar nuevas estrategias terapéuticas que inhiban el proceso desencadenado. Este año la agencia española del medicamento ya ha aprobado en mercado el primer fármaco antifibrótico por los beneficios demostrados en estos pacientes, y existe un abanico de otros fármacos antifibróticos en ensayo clínico que podrían añadirse a esta aplicación. Asimismo, continúan siendo muchos los esfuerzos en investigación experimental para lograr una terapia que mejore la supervivencia, que permita individualizar el tratamiento óptimo para cada paciente y, en un futuro, que permita avanzar hacia la regeneración del tejido lesionado.